miércoles, enero 08, 2003



Las utopías eutópicas y las utopías cacotópicas

Hace ya muchos, muchos años, mientras cursaba pedagogía y en asignaturas como Sociología Educativa, Filosofía de la Educación y otras en las que unos grandísimos maestros fomentaban el debate en torno a cualquier contenido, recuerdo que varios atrevidos osábamos insinuar porqué los gobiernos no reducían sus presupuestos en defensa y los reinvertían en educación o en servicios sociales y culturales.

Cada uno de aquellos profesores nos miraban con un leve rictus entre la incredulidad y la recriminación y nos dejaban bien claro que no viviríamos para presenciar políticas ni gobiernos en esa línea y que las utopías, tanto las eutópicas como las cacotópicas, tendríamos que dejárselas a las ONGs, pues como profesionales educativos tendríamos que trabajar entre la carencia y la marginalidad de una profesión jamás valorada en su justa medida.

Hablaban del comercio internacional de armas, del injusto reparto de la riqueza, de la posesión de los medios de producción, de El Capital, de la ordenación del mercado mundial...

Pero la utopía se tornó realidad o, al menos, en un intento de ella.

Luiz Inacio Lula da Silva lo está intentando, y sólo por eso merece un lugar en esta página.Primero fue el presupuesto de 12 cazas que no se comprarán y cuyo importe se reinvertirá en políticas sociales...ahora las favelas, barrios y casas donde viven más de 52 millones de pobres que podrían pasar a ser de su propiedad.

¡Bravo!

A ver hasta dónde le dejan llegar...