viernes, enero 03, 2003



Qué será, será...

Tenemos ante nosotros un nuevo año, todo enterito, para hacer con él lo que queramos.
Como si de una nueva agenda se tratase, seguro que estos primeros días nos esforzaremos en escribir líneas muy rectas, con nuestra mejor letra.
Algún osado u osada incluso utilizará bolígrafos y marcadores de colorines, emulando artistas barrocos y herreristas...(¿o se dice herrerianos?)
Pero seguro que terminaremos escribiendo de cualquier manera, incluso arrancaremos alguna que otra hoja y utilizaremos esos días que necesariamente quedarán en blanco para anotar cualquier cosa, importante o banal, da igual...pero olvidaremos bien pronto la ilusión del estreno, de la página en blanco...
Es el momento de los propósitos: de los buenos, de los malvados, de los inevitables...
Incluso de premoniciones, vaticinios, y todo tipo de adivinaciones.
Personalmente, sólo tengo claro que trabajaré más de 200 días, que compararé, por imperativo fiscal, mi primera vivienda y que intentaré, siempre y cuando mi salud lo permita, quedarme embarazada a finales de año...
Lo demás, llegará, me sorprenderá, me alegrará o me entristecerá...pero saldremos adelante, todos y cada uno de nosotros, saldrá adelante y volveremos a brindar con uvitas y cava dentro de...¿cuántos? ah sí...362 días.