lunes, marzo 31, 2003



El día que lloró Santa Cruz

Era un domingo más y sin más. Lo único destacable es que era Domingo de Pascua y la ciudad estaba vacía.

Sin embargo, recuerdo todos y cada uno de los minutos de aquel terrible día.

La noche anterior habían cambiado la hora y nos despertamos muy tarde.

Salimos a la calle y nos acercamos a mi oficina: esperábamos la confirmación vía fax del que sería el hotel en el que pasaríamos la luna de miel. El esperado papel estaba en la bandeja... ¡¡bien!!, hotel OK, ya teníamos el viaje de novios confirmado en su totalidad...nos casábamos tan sólo 20 días después.

Decidimos dar un paseo.."¡Qué bochorno!, ¿verdad cariño?"...Estaba totalmente gris, plúmbeo...apenas llevábamos un kilómetro y el sudor ya perlaba las frentes, los brazos...Llegamos hasta el parque García Sanabria..."¡A ver si hoy tenemos suerte y encontramos ranas!". No habían ranas. Quizás lo presentían.

Nos acercamos a por la prensa. El ritual de todos los domingos: la prensa, un libro (Con ánimo de ofender, de Pérez Reverte) y algunas revistas tontas para entretener la tarde del domingo. Coincidimos con Félix, un amigo común...hablamos de muchas cosas: la despedida de solter@s que habíamos hecho el sábado anterior, el precio de la vivienda...

Y comenzó a llover. Esperamos un rato, ya eran las dos y media de la tarde...pero no paraba de llover. Ale decidió que teníamos que llegar a casa. Nos despedimos de Félix y nos lanzamos a la calle. ¡Joder cómo llovía!. Nos metimos en un portal en la Calle del Pilar. El agua comenzaba a rebasar los bordillos de las aceras. Pasamos por delante de la Iglesia del Pilar...no soy creyente pero cuando vi a la pequeña Pilarica en la puerta le pedí que nos ayudase a llegar a casa.

Nos armamos de valor y atravesamos toda la ciudad corriendo. La lluvia era tan intensa que casi no podía respirar, parecía que me iba a ahogar bajo la tromba de agua.

Jamás nos habíamos empapado así. Ya en el ascensor, nos entró la risa tonta. Recuerdo que Ale se quitó la camisa y empezó a escurrirla...caían chorros por todas partes. Llevábamos empapada hasta la ropa interior. Creíamos que todo había terminado.

Pero seguía lloviendo, y no veíamos a los edificios del otro lado de la plaza, y comenzaron los rayos y los truenos.

Se había hecho de noche y sólo eran las tres y media.
Almorzamos y nos tumbamos en la cama con nuestro preciado botín de prensa, revistas y libros. Encendimos la radio, pero no se escuchaba bien, a cada rayo que caía se oía un zumbido atronador...

Ale se levantó...quería ver "como estaba el patio"..."Cariño ven, pero no te asutes..."

La sala estaba inundada de agua, y la habitación del fondo, y el baño, y la solana, y nuestro dormitorio...maldita costumbre de tener las ventanas abiertas. Claro, con dos fumadores hay que ventilar. Ingenua de mí, cogí la fregona..como si una fregona pudiese con aquel caudal de agua. Nos dimos cuenta de que el sumidero del balcón estaba atascado, salí con un bolígrafo a intentar desatascarlo y en eso que cayó un rayo en mis narices. Y me cayeron dos lágrimas...la impotencia y el susto me vencieron. Ale reaccionó mejor y comenzó a achicar el agua con la pala de la basura. Oímos a los vecinos...abrimos la puerta y...jamás olvidaré la cascada de agua por toda la escalera, entrando en la casa. Y no paraba de llover.

Lo demás, ya casi es una nebulosa...me llamó mi hermana e intentaba hacerme la fuerte, luego mis padres, luego los padres de Ale desde Zaragoza. Ellos ya sabían "todo" lo que estaba ocurriendo aquel día en Santa Cruz, pues Antena 3 ya estaba retransmitiendo las imágenes que luego todos vimos...nosotros ya no podíamos, no había luz, luego fallaron los teléfonos...

Achicada el agua, nos conectamos a la radio y comenzamos a darnos cuenta que estábamos dentro de una gran tragedia: personas muertas, personas aisladas, personas desaparecidas...coches sin control flotando por las calles. "¡Joder, nuestro coche!" Decidimos salir, quizás la mayor gilipollada que hemos hecho en toda nuestra vida. Nos la jugamos. A pesar de haber dejado de llover, el agua aún nos sobrepasaba las rodillas. Pudimos pisar una alcantarilla abierta y no darnos cuenta. El coche bien, gracias.

Otra llamada, ahora del trabajo de Ale...y decidió salir, a pie, a más de cuatro kilómetros. Fueron las dos horas y media más largas de mi vida: una cajetilla entera de Lucky y media botella de J&B.

Era de noche, por lo que tendrían que ser más de las 8 y media de la tarde. No había luz, ni teléfono...la pared de la sala estaba empapada "sólo falta que se me caiga la pared encima" y la radio mostrándote la verdadera tragedia: el joven de protección civil que murió tras salvar a los cuatro miembros de una familia, la niña que murió bajo los escombros de su casa, la Playa de las Teresitas, el Barrio de San Andrés, la Avenida de Anaga, Los Lavaderos, el Barrio de la Alegría...en todas partes hablaban de desaparecidos, de personas en las azoteas, de muros que se desplomaban, de coches a la deriva, de casas que se venían abajo...

Ale volvió a casa. ¡Gracias, gracias y gracias!

Y yo sólo tenía ganas de llorar y llorar.

Hoy hace un año, y Santa Cruz rendirá hoy un merecido homenaje a toda la ciudad en general (los chichas se comportaron como auténticos jabatos) y a las personas y asociaciones sin cuya ayuda hoy estaríamos lamentando más de 8 víctimas.

Quiero, desde aquí, mandar un beso y una abrazo enorme a todos los familiares de los que murieron y a todos los que, anónimamente, se lanzaron a ayudar, a colaborar...dándolo todo sin pedir nada a cambio.

Santa Cruz y sus gentes demostró más que nunca ser fiel merecedora de sus títulos de Muy Noble y Muy Benéfica.

sábado, marzo 29, 2003



A todas las mujeres de esta maldita guerra

No estás sola, alguien te ama en la ciudad no tengas miedo, que la alborada llegará. No estás sola, te queremos confortar sal al aire, cuéntanos de lo que vas. La noche es así niña no olvides sonreír que mañana empiezas a vivir. La nana de la luna llena tocaremos para ti, y en tu cama el sueño bailará flotará entre confidencias... Letra: Miguel Ríos

viernes, marzo 28, 2003



...muerte, muerte y muerte. Me cago en el día en el que nacieron George Bush, Tony Blair y Jose María Aznar

lunes, marzo 24, 2003



Olvidé que tenía una página.

Y no tengo ganas de escribir.

Supongo que toca hablar de la guerra, pero no me apetece ¿qué puedo decir de nuevo? Creo que nada. Sobre todo porque me faltan datos, porque creo que los medios de comunicación, de una y otra parte, me están mintiendo y tomando el pelo. No me creo nada, de nadie.

El trabajo sigue tan aburrido como siempre. Hoy vamos a presentar una denuncia por misoginia y vejación a un alto cargo de nuestra comunidad autónoma que, además, es uno de mis jefes. No sé qué va a ocurrir. Supongo que nada o, al menos, nada de lo que esperamos que ocurra.

La vivienda sigue subiendo, intento fumar menos y estoy consiguiendo justo lo contrario, Almodóvar ha ganado su segundo Oscar...pues, enhorabuena, pero no creo que sea para tanto (en líneas generales, no me gusta el cine español), estoy agotada, no sé si será por la famosa astenia primaveral o porque me he tenido que pluriemplear para poder compar cuatro paredes con un techo...

Supongo que no tengo un buen día. Sigo esperando acontecimientos...no sé cuáles, pero algo que me sirva de catarsis a tanta monotonía y mal rollo.

martes, marzo 11, 2003



¡Vaya susto!

Ayer, lugareños y turistas que estaban aprovechando las estupendas temperaturas de estos días en el Lago Martiánez del Puerto de la Cruz, tuvieron la posibilidad de contemplar un levantamiento de mar con olas de más de cinco metros.

Y, como ya ha ocurrido en otros casos similares, once "guiris" casi no lo cuentan pues lo importante era tomar la foto de rigor de lo que, para ellos, no era más que una extravagancia climatológica de las Canary Islands.

Lo importante es que no pasó de un buen susto...pero por aquí comenzamos a tener un especial miedo al mes de marzo.

El 31 hará un año...

lunes, marzo 03, 2003



Desde El Médano...

Je, no lo pude evitar...ayer vimos el ciber paseando por la playita y ya estoy enganchada de nuevo...

Siguiendo mi tónica habitual de daros un pelín de envidia...os dejo una pequeña postal de lo que "casi" estoy viendo desde la puerta...

Ya tengo las primeras quemaduras de sol...¡¡y ni os imagináis lo a gustito que duelen, juas!!

He de ir cortando...pero estaré de vuelta el miércoles (snif)

¡Feliz carnaval para todos...sea cual sea la modalidad elegida!