miércoles, enero 22, 2003



Una ciudad frente al mar

El, por ahora, último propósito urbanísitco de nuestros gobernantes es integrar, definitivamente, la ciudad de Santa Cruz de Tenerife al mar.

Es cierto que la constitución del actual muelle y la colocación de los contenedores nos hace olvidar muchas veces que el mar está ahí, apenas a cien metros de la plaza. El proyecto promete: un enorme pulpo conectará a la Plaza de la Candelaria con el muelle, habrá una zona específica para el atraque de cruceros, los contenedores irán a hangares de diseño galáctico y un enorme acuario decorará los bajos de tan espectacular proyecto.

Paralelamente, han comenzado las obras del nuevo centro para la cultura de Tenerife: 16.200 metros cuadrados para un instituto cultural, una biblioteca y una sala de fotografía.

Tanto el nuevo muelle como este espacio cultural serán la guinda de la nueva fachada de la ciudad: parque marítimo César Manrique, Recinto Ferial, los oasis artificiales en la Playa de Las Teresitas, el Palmetum y el Auditorio (en la foto).

Y el metro

¿Necesidad, megalomanía, tapaderas, despilfarro o un pedo más grande que el culo (con perdón)?